Gianni Infantino en un congreso de la FIFA

Hace un par de años, Gianni Infantino anunció que la copa del mundo del 2026 sería de 48 equipos y que habría más de 100 partidos en el transcurso de un mes. Esto trajo muchísima polémica, porque es no se entiende la decisión.

Muchas teorías hay alrededor de esta decisión, a continuación las explicaremos, pero la verdad es que un mundial tan largo es complicado que sea atractivo y competitivo. Esto cada cuatro años puede tornarse aburrido y eso es un riesgo porque podrían matar la copa del mundo para siempre.

Es una gran idea doradobet descargar porque ahí están los mejores eventos con las mejores cuotas, aparte lo puedes hacer de la manera más segura. Este verano viene la Copa América y la Eurocopa y es una excelente idea hacer de tu pasión algo aún más emocionante.

Vamos a repasar las razones por las que un mundial tan concurrido no es una buena idea y solo es una decisión política.

Es para quedar bien

Desde que entró a la FIFA las decisiones de Gianni Infantino han sido para quedar bien con todo el mundo. La idea es dar la versión de un presidente que nunca se equivoca y que puede ser como cualquier persona, humanizó a la figura de presidente de la FIFA.

Un ejemplo claro de esto es invitar a influencers a eventos del máximo organismo porque piensa que estos pueden acercarlo a nuevos mercados, pero esto lo ha llevado a tener mucha crítica, porque estos personajes no son bien aceptados en el mundo del futbol, al contrario, son ridiculizados.

Otra de estas decisiones fue el mundial de Qatar, pudiendo dar un golpe de autoridad y quitarles la sede, decidió no hacerlo para quedar bien con el mundo árabe, pues sabe que ahí está el dinero del futuro, es más les acaba de otorgar la copa del mundo del 2034, cuando hubo claramente violaciones de derechos humanos en el mundial pasado, cosa que claramente no le importó.

Cuando dio su idea de un mundial de 48 selecciones fue fuertemente criticado y muchos personajes especialistas dijeron que abarataría el torneo, pues tantas selecciones y partidos harían que perdiera el atractivo.

Tienen razón, clasificar al mundial es complicado y no todos pueden hacerlo. La Copa del mundo debe significar un premio de un proceso largo para las selecciones que participan, el ampliar el cupo hace que ya cualquiera pueda calificar y esto evidentemente baja el nivel.

Para la FIFA, en teoría, más partidos, significa más dinero, pero no está garantizado que la gente vaya a ver a un par de selecciones con jugadores que nadie conoce solo porque es un mundial. Se ha demostrado en varias competiciones que si no están las figuras, a la gente no le interesa.

Aparte, esto significa un gasto innecesario para la sede, pues se triplican los gastos y la recompensa no es tanta. Después del fracaso del mundial 2002 se dijo que no habría más sedes compartidas porque esto era una pesadilla logística, pero para Infantino no es problema, porque ahora dio la sede a tres países, haciendo los traslados de equipos, periodistas y aficionados una verdadera pesadilla. Todo esto para quedar bien con patrocinadores y federaciones pequeñas que votaron por él en un inicio.

Es pura política

A Infantino le importa poco lo que puerta suceder con los jugadores, que al final son lo más importante, al dirigente le importa hacer relaciones con las federaciones pequeñas, que son muchas, y quedar bien donde está el dinero, para poder reelegirse sin problema.

Vamos en camino de otra dictadura parecida a la Blatter o Havelange que hicieron y deshicieron el futbol a su antojo, con la única diferencia que el italiano tiene la gran posibilidad de matar el torneo de selecciones más grande del mundo, solo para quedarse en la silla más importante del balompié mundial el tiempo que quiera.

Hay un estudio de una universidad importante europea que menciona que entre más partidos menos nivel, pero la estadística que debería de importarle es que la gente no asistirá, consumirá o verá los juegos de relleno. En un torneo como estos hay selecciones que son de adorno, y en un torneo de 32 equipos hay cerca de 5 partidos malos, ese número aumentará y tanto gasto no se podrá justificar.

¿Es sostenible?

A largo plazo no lo es. Le está dando mucha importancia a Estados Unidos y al mundo árabe que si se aburren del juego, se acabó la fiesta. El país americano sigue tratando de posicionar al deporte como una de las primeras opciones, pero no ha podido.

La llegada de Messi ayudó, pero lo que es una realidad es que no es el más popular en este momento. Tendrán la Copa del mundo y la Copa América, ambos torneos los obtuvieron gracias a la buena gestión del presidente de la FIFA, pero si no logran dar un buen golpe, es posible que esta idea de mundiales tan grandes, se vaya a la basura.

Ya hay muchas personas esperando esta falla para regresar al mundial de 32 selecciones que es rentable para todos y crea expectativa. Falta mucho tiempo para esto, y evidentemente no queremos que le vaya mal al deporte, pero están construyendo un castillo de naipes en lugar de ladrillo, y esa fragilidad pasa factura.