Mejorando capacidades para los peruanos. La genial idea de Reto Excelencia

Juan José Martínez Ortiz

Por: Juan José Martínez Ortiz (Experto legal. Consultor en Derecho Administrativo y Gestión Pública) 

Hace casi 20 años tome la decisión de realizar estudios de postgrado fuera del país. Al comienzo fue un sueño, que luego se convirtió en una obsesión y finalmente en un reto. Fue un sueño porque se veía lejano, difícil de hacer. Si bien había estudiado en una de las mejores universidades del país, sentía que habían muchas cosas por hacer. Desde aprender inglés y ser fluido en ese idioma hasta obtener el financiamiento. En esa época me decían que mis estudios de maestría requerían no menos de 50,000 dólares. Para mí, eso era un mundo de dinero y no tenía de donde obtenerlo. Por otro lado, el inglés se me hacía muy complicado. A los 24 años lamentaba no haberlo estudiado cuando era más chico.

El sueño luego se convirtió en obsesión. De alguna manera, de alguna forma, tenía la convicción de que tenía que hacerlo. Estaba convencido que una maestría fuera del país, en una universidad top del primer mundo, cambiaría mi vida. Por lo menos mi vida profesional.

Estudiar ingles, obtener los puntajes que se requerían en los exámenes internacionales y obtener luego el financiamiento, fueron labores a las que me dediqué con devoción por casi tres años. El ingles finalmente lo aprendí. Lo más duro fue obtener el financiamiento. Ahorre todo lo que pude por tres años, pero aún así estaba lejos de alcanzar la suma que necesitaba.

En esa época habían muy pocas becas. Ninguna peruana, todas eran internacionales. Postulé a todas las que se conocían. Imagínense como era. No había internet. Todo se hacía por correo.  Ojo. No correo electrónico, sino, correo postal (en papel). Pedir información, referencias, recomendaciones, envío de papeles. Creo que me gasté una fortuna en gasto de envío por correo postal.

Nunca obtuve una beca. Si bien había sido un buen estudiante, para obtener esas becas se requería eso y además, un poco contactos y otro de suerte.

Hubo momentos en que pensé que el reto me superaba. Sentí mucha frustración cuando empecé a recibir los sobres gordos de las universidades. Los sobres gordos indicaban que uno había sido aceptado, porque además de la carta donde a uno le daban la grata noticia, venían un montón de papeles que llenar. Entre ellos, los de información financiera. Es decir, papeles donde la universidad nos preguntaba si teníamos la plata para ir. Esta parte era crucial, porque si uno acreditaba la capacidad financiera hasta cierta fecha, la oferta de aceptación caducaba. Además, sin información financiera acreditada, no se podían hacer los papeleos para la visa.

Nunca obtuve una beca. Ni en el Perú, ni en el extranjero. Nunca obtuve un préstamo en el Perú.

Gracias a Dios, una de las universidades a las que postulé acababa de abrir un programa de préstamos para estudiantes extranjeros. En el año 1999, New York University iniciaba un programa de créditos educativos para estudiantes internacionales, con el Citibank. Finalmente pedí un préstamo por 25,000 dólares. Con mucho temor, por el riesgo asumido, me lancé y pedí el crédito; el cual me fue concedido rápidamente (para mi sorpresa).

Ahora cuento esto como una anécdota. Ahora entiendo lo que la determinación y la fe puede lograr en las personas. Sin embargo, no puedo dejar de pensar en tantos otros que teniendo iguales o mayores méritos que yo, no lograron hacerlo y se quedaron en el camino.

Por eso veo con mucha satisfacción que el Gobierno Peruano haya creado el programa Reto Excelencia. Un programa de créditos y becas, orientado a personas que prestan servicios en el Sector Público. No voy a repetir lo que siempre digo sobre el Sector Público. Sobre lo importante que es y sobre cómo afecta nuestras vidas. Por eso me alegra doblemente que este programa esté orientado a personas del Sector Público.

Quienes tengan interés en seguir el camino de una maestría fuera del Perú, en una buena universidad deberían revisar esta alternativa. Mi experiencia personal me indica que hacer la maestría en USA, en una universidad top, fue una de las cosas que hice bien en mi vida. Cuando alguien me pregunta sobre el tema, sonrío con satisfacción. Sólo puedo decir que la experiencia vale la pena y paga con creces …. no sólo monetariamente, sino en oportunidades, contactos y en experiencias para la vida.

Los invito a visitar la página web de Reto Excelencia. Estoy seguro que ésta les abrirá el mundo.

http://www.retoexcelencia.gob.pe/

Written by Miguel Ampudia Belling

Abogado por la UNMSM. Maestrando en Gerencia Pública por la Escuela de Posgrado - Universidad Continental. Miembro fundador del Grupo de Estudios de Derecho Mineroenergético – GEDEM. Director de Peruweek.pe.
(Contacto: +51 980326610 | peruweek@peruweek.pe)

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